Quise escribir La isla del tesoro, pero un amigo me contó que un tal Robert Louis se me había adelantado...
Esta malagueña, ya de pequeña, jugaba a ser escritora en lugar de a las casitas...
Nací en España, aunque tengo nacionalidad sueca (cosas de la burocracia, y de mi padre, que algo tuvo que ver). Cuando era más pequeña que ahora, me encantaba coger moras en el pueblo de mis abuelos...
Y a mí me dio por escribir. Y contaba cuentos y escribía y contaba y escribía y comía pipas y escribía y corregía y, a veces, estornudaba...
Raúl Vacas nació de forma casual el día de su cumpleaños...
De pequeño no le gustaban los calcetines apretados. Tampoco peinarse con la raya al lado...
Lucía quiso leer antes que hablar. Pasaba el dedo por los cuentos y entonaba sonidos raros...
Cuando sea mayor quiere ser constructora de historias. Como es poco disciplinada, no entrena a diario, qué va...
Siendo yo muy niño, mientras bostezaba, un rebaño de cuentos se me coló dentro de la boca y sin querer, me lo tragué.
Nada más nacer, la comadrona le dijo a mi madre: Conchi, has tenido una lectora. Como eran otros tiempos, eso no cayó demasiado bien en mi familia...
Liza vive en Argentina desde el día en que nació, que fue hace bastantes años, justo el mismo día...
Me he comprado –bien barato- un atrapa-cuentos. Antes, los cuentos, montones de ellos, pasaban por mi cabeza. Se acercaban, me saludaban y se iban. Ahora, cuando los veo venir...
Nació en Madrid en 1972 y lució rodilleras en los pantalones hasta bien entrada la pubertad. Ahora que vive en Finlandia...
Nieta de un escultor y una francesa, su infancia estuvo marcada por la compañía de los dibujos de academia de su abuelo, y de los cómics de Tintín y Asterix que su madre compraba...
Nono Granero nació en blanco y negro, justo en el momento en que Massiel ganaba el Festival de la Canción de Eurovisión...